Y la vida sigue su camino

Quien mas quien menos, cuando se habla del tema, en su entorno familiar tiene o ha tenido un enfermo de cáncer. Se intenta tapar o no hablar mucho del tema pues es sumamente delicado pero lo cierto es que son enfermedades, por los diferentes tipos de cáncer, que o bien antes no trascendian o bien nos estamos haciendo mayores o bien hay un aumento de los casos o, un poco de las tres cosas a la vez.

No es un tema que se deba abordar con ligereza pero, da para pensar. Para pararse a pensar, al margen de si es o no alarmante el incremento de casos sino, la cuestión de nuestro efímero paso por la vida. Una de las cosas que tengo en mente cada mañana cuando me miro al espejo – bueno me miro poco pues salgo con unos pelos…- y me digo: Neng!!! Pásatelo bien si puedes.

Creo que la mecánica de la sociedad nos lleva por un camino alejado de lo natural. Las pequeñas batallas diarias en contra de compromisos adquiridos, en contra de lo establecido, en contra del sentimiento de culpa, en contra si me apuras, del pecado original. Salirte de esos pequeños actos de esclavitud moderna, poder decir NO a las cosas, poder no creer a pies juntillas a los que adoctrinan. Personas que intentan dirigir los pensamientos generales de la masa que a su vez son dirigidos por un orden mucho mas general. Somos como un gran banco de peces que se mueve muy deprisa y que unidos intentan protegerse de las dentelladas de los tiburones. Alguien acabará en el estómago del depredador pero por estadística, igual no te toca a ti y puedes seguir “viviendo”.

Pondré otro ejemplo de la relatividad del comportamiento humano. Ángela y Luis son cuidadores de personas especiales. Tienen a su cargo a enfermos con graves secuelas por traumatismos craneales. Es gente muy especial. Son muy sensibles, carentes de algunos convencionalismos y hacen cosas que hacen pensar al resto de los “normales”. Cuando los ves y aprendes de ellos llegas a la conclusión de que los no normales somos el resto. Vivimos o nos hacen vivir en una eterna hipocresía.

Si la vida es tan corta de por sí… ¿a qué viene ser esclavo de nosotros mismos? ¿NO sería mas lógico vivir el día a día, disfrutar del momento con todas tus fuerzas? ¿Por qué trabajar tantas horas, hipotecas de lujo y subidas de precios desorbitada? ¿Por qué permitimos esta clase de vida? ¿NO hay un mundo mejor? Me temo que somos mas necios de lo que nos creemos.

Son estos reveses de la vida los que nos abren un poco mas los ojos.
Sin pretender ser un reaccionario ni revolucionario decir, que podemos mejorar los pequeños retos del día a día con mucha autoestima, con respeto al prójimo y gozando de estar vivo de verdad cada día.

Los que se van no lo hacen en balde. Dejan un bello mensaje a los que se quedan. Vivir con alegría y dignidad lo único que tenemos: !!!Nuestras vidas!!!