Necesitamos un piso de alquiler social

Mi hermano en estos momentos vive conmigo porque no dispone de vivienda propia, ni tiene capacidad económica para poder alquilar un piso ya que los precios son desorbitados. Yo vivo en un edificio sin ascensor y la enfermedad que padece le afecta a las extremidades inferiores, dificultándole que pueda caminar, que ya tiene que hacerlo con un andador.

En estos últimos dos años, he visitado el Ayuntamiento en varias ocasiones y también he solicitado ayuda a la Generalitat, pero parece que nadie nos quiere escuchar.

La situación que vivimos es muy complicada ya que, al no disponer de ascensor en mi edificio, mi hermano no puede salir a la calle y debe quedarse encerrado en casa todo el día. En estos momentos, únicamente sale cuando tiene visita con el doctor y después de la visita, se pasa 3 días en cama por los dolores que le ocasiona el tener que bajar y subir los 30 escalones que hay desde la calle hasta mi piso. Además, de que esta situación está afectando a su salud mental.

Hace dos semanas volví a presentarme en el ayuntamiento para saber en qué situación estaba el caso de mi hermano, ya que habíamos solicitado un piso de los del Xaloc, una promoción de 43 viviendas de alquiler social en el municipio de Les Roquetes y, no nos lo habían dado. Como siempre, me encontré con la respuesta de que no había nadie que pudiera atenderme en ese momento y que pasarían nota y alguien me llamaría.

El 13 de noviembre me reuní con la Consellera d’Habitatge y la responsable de Educación y Ocupación, Francisca Carrasquilla, que también es la quinta teniente alcalde. En las 3 horas que estuvimos reunidas, lo único que me dijeron es que no podían hacer nada, ya que no había ningún piso disponible en esos momentos. Y la explicación que me dieron sobre por qué no nos habían adjudicado ninguno de los 43 pisos del Xaloc fue que mi hermano no tenía unos ingresos mínimos de 15.000 euros anuales. Que evidentemente, no tiene, porque si los tuviera no solicitaríamos un alquiler social. Pero esa información tampoco se nos facilitó cuando hicimos la solicitud.

Nos sentimos totalmente desamparados y estamos cansados de tener que ir de un sitio a otro y que siempre nos digan que van a trabajar en el caso para encontrarnos un par de meses más tarde con que la situación es la misma y no han hecho absolutamente nada. Cansados de que pasen la pelota de un tejado al otro, del Ayuntamiento a la Generalitat, y viceversa. No estamos pidiendo nada fuera de lo normal, simplemente que nos ayuden con una vivienda adecuada para una persona minusválida, que también tiene derecho a una vida digna.